En la era de las comunicaciones... señales de humo

Uno hubiera pensado que la falta de comunicación disminuiría con el avance de la tecnología. Desgraciadamente, este no ha sido el caso. Estamos más conectados que nunca, pero parece que sólo nos alejamos más de la comprensión entre humanos.

En El Principito se dice que "el lenguaje es fuente de mal entendimiento". Cómo nos complicamos la vida a veces al escribir o decir algo de manera que "lo que dijimos no dice lo que queríamos decir". No es nada fácil convertir nuestros pensamientos en palabras y expresarlas de tal modo que nuestro interlocutor las comprenda completamente. Lo que decimos no tiene que ser entendido según como nosotros creemos, sino conforme a quien lo recibe.

Así pasó con una publicación de alguien de salud que se enojó contra "los anticuarentena". Después se "extinguió" la publicación pero quedó la captura de pantalla y a "los anticuarentena" la gran duda: ¿qué hacemos "si el bicho maldito nos ataca? ¿Habrá respiradores para nosotros?".

"Calma, calma, que no panda el cúnico"... es solo "una expresión escrita en un lugar incorrecto". Supongamos que me enojo con un amigo y "lo mando a pasear al centro". No es grave si lo digo en casa, ahora si la misma expresión y de la misma forma lo digo en la radio... cambia. Cuidado!!!

Hay que elegir el lugar y la forma

Un hombre entró a un quirófano para una operación de corazón. Adentro lo esperaban los médicos. El paciente ve al marido de su amante y en un gesto de "arrepentimiento y agradecimiento" lo llama y le dice con voz baja: "Doctor, discúlpeme, durante 5 años fui amante de su esposa... No lo haré más". El médico le toca el hombro, le guiña un ojo y le responde: "Tranquilo amigo, de acá no sale".

Amigo lector, ¿se queda tranquilo Ud.? ¡Minga! La confesión no fue oportuna ni tampoco en el mejor lugar. Una red social hace las veces de quirófano. Yo avisé.

Rescatando algo muy bueno

Ya demasiados problemas tenemos como para generar algunos más. Si podemos evitar generar un malestar permanente hagámoslo. La sana convivencia se logra con buena onda, mucha paz,  paciencia, tolerancia, empatía. 

A propósito de esta última palabra? está muy bueno ponerse en lugar del otro o como decimos: hay que ponerse en sus zapatos. Algo así hicieron esos lindos vecinos (lindos interiormente), que un día vieron una necesidad urgente en la casa de una vecina y "pusieron manos a la obra". Le están construyendo un baño y le cambiaron la vida. Con ese "pequeño detalle". 

Eso es empatía... ponerse en lugar del prójimo. A nadie le gustaría llamar baño a cuatro chapas y una lata que hacía de inodoro y ni siquiera existía un pozo ciego. 

Esto es muy bueno! Y lo más importante: este año no hay elecciones y los que están trabajando no son políticos, son vecinos "comunes" con un corazón "especial". 

La gente está sensible

Hace pocos días se produjo un hecho que tiene que servir como ejemplo (de lo que no hay que hacer). Es sabido que un político "hace política". A veces hablando, otras actuando o accionando (porque actuar lo hacen casi siempre. Son buenos actores). 

En este caso un hombre de la política quiso saber algo (para cumplir con su rol de control) y llamó a casa de "una familia aislada". Según trascendió parece que muy poco le interesó el estado de salud de las personas de la casa, sino saber sobre falta de insumos hospitalarios.

Los políticos también necesitan "entrenarse". Y eso se logra en la vida diaria y no solamente cada dos años visitando hogares. Si lograran más presencia en las calles y en los hogares, los llamados podrían ser más "cortos", más "puntuales" y "no llamarían la atención". 

Siempre que aparecen es porque necesitan algo. O necesitan votos o necesitan información. Pocas veces a solucionar los problemas. Lástima, gente grande que no aprende.

Por último, un encargue: 

A partir de hoy tratemos de pisar con mucho cuidado. Andemos prestando atención en que nos rodean cosas muy importantes para tener presente todo el tiempo: vecinos, gente que vemos todos los días, que conocemos bien y que necesita nuestro apoyo.

Seamos buenos vecinos, respetuosos, solidarios, distribuyendo buena onda en cada lugar que vamos y principalmente si todo esto se relaciona con la Pandemia. El que crea que no está en riesgo de contagio "que levante la mano"

¡Hasta el próximo sábado!

jcantero@elfenixdigital.com