Tengo varios artículos que dicen de los males que nos producimos de continuo, tenemos la manía de buscarnos tribulaciones, y desgraciadamente encontramos lo que buscamos, todos los que aman el peligro perecen en él y el que busca enfermedad la encuentra un día, esto nace de nuestra mente, que la tenemos en actitud negativa.                                                     

Muchos de los que se creen desgraciados lo serán con el tiempo sino corrigen su actitud mental. Cada  uno de los quejosos tiene su especialidad, esta quienes temen caer enfermos, o se figuran que ya tienen tal o cual enfermedad, imaginan  que y tienen estropeado el hígado o los riñones y que el corazón marcha a los tumbos, también piensan que les puede salir un cáncer en cualquier lugar, los aprensivos nunca están tranquilos en ninguna parte, si es invierno frigidísimos, todo el año se quejan de tal o cual cosa, no se puede vivir con el tiempo , todo está para ellos desentonado, vivir así con la creencia de que cualquier día aparezca una enfermedad, no se dan cuenta que los temerosos pensamientos reaccionan sobre las funciones de la digestión, altera el jugo gástrico y entorpece la digestión, y aquí el desarreglo producido por nuestra mente.  De los aprensivos, los peores son que se atormentan con la idea que pueden morir de una enfermedad heredada, la cura de estos achaques imaginarios, ésta en pensar por medio de gran voluntad, que estamos sanos y que nada puede pasarnos, si desechamos los morbosos pensares, estaremos completamente seguros de nuestra salud.  En estos momentos la medicina aconseja la cura de enfermedades varias con la risa y el buen humor.                                                                        Vez  pasada leí que en Austria la autosugestión curo una nena de 13 años, enferma de un mal irreversible, se hicieron eco de ellos muchas publicaciones, la citada criatura desfallecía día a día, el médico que la atendía llego una tarde, ella dormía, encima de su cama una revista semanal, él médico la tomo, al leer comprobó que la heroína de la novela moría despaciosamente de un mal parecido al de ella, de inmediato el médico llamo al escritor de la novela, después de las explicaciones del caso pudo persuadir al escritor, que hiciera vivir a la nena irreal de la novela, así fue que cambio el texto y vivieron las dos, la de fantasía y la real. Curioso caso de auto curación simultánea.                                         

Cada día se comprueba más, que la energía mental en positivo produce milagros.                 

Esto puede aplicarse a otras actividades, no tan importante como la salud, por ejemplo hay quien se queja continuamente que su negocio no vende, lamentan su mala suerte, dice que nunca progresara, van por el mundo con su fracaso y apatía total, hablan demasiado pero no hacen nada. Este habito es funesto por lo contagioso, pues quebranta la confianza de quienes están junto a él , pues un pesimista que habla mal de su negocio no puede dirigirlo tan bien, como el que se aficiona y lo enaltece.                                                                                                     

La mala práctica de menosprecia todo, paraliza la mente en negativo, en vez de orientarla en sentido positivo.                                                            Nadie puede prosperar mientras hable de caer, la imaginación extraviada es uno de los peores enemigos de uno mismo. A veces la paz domestica de toda la familia, se altera por estos descontentos, que siempre están en negativo.                                                                                 

Además nadie los puede ayudar, es la enfermedad del pesimista, tiene que comprender el que todo lo ve mal, que no está en su sano razonamiento, pues si tenemos cosas malas, pero pasando de pesimista a optimista, vera que se disipan muchos los males.                                       

Así quien hermana el optimismo y conoce como es la vida, y cual su finalidad, sabe que la salud, armonía, amor, profesado sin falsas posturas son perdurables, pues la discordia, la enfermedad, no tienen realidad afectiva, sino que es el resultado negativo de la ausencia de salud, armonía y bienestar, como las tinieblas, son falta de luz, si tratamos en lo posible de equilibrar nuestro ánimo la vida tendrá nuevo sentido, será lo mismo nuestro destino, porque hemos transmutado todo lo que nos fue negativo, en algo bello, a darle sentido a nuestro vivir, así podemos hacer de nuestra vida un infierno o un hermoso paraíso.                                           

Nosotros somos los que queremos ser, felices o desgraciados, no le hagamos el juego a los pensamientos negros o nubosos, miremos el sol de frente, con la fe y esperanza de días mejores.                                                                                                                                                         

A muchos les parece que serían dichosos si se hallaran en diferentes circunstancias, pero los importante es saber qué hacer ante las circunstancias, si esta le trae descontento, tortuosidades, desventuras, falacia, en este caso, debemos poner la mente en positivo y transformar todo en nuestro beneficio, o sea revertir el proceso contrario en favorable, cambiar el carácter y ser como el lirio de agua que absorbe pureza y hermosura del lino y cieno del agua en que florecen.                                                                                                             

 Si así hacemos tendremos en el devenir  una vida de paz y sosiego, sin ofuscaciones y con el ánimo atiborrado de buena sabiduría.

*** Roque Severo (1922-2003). Juarense como el resto de su familia, fue el mayor de 5 hermanos. Lector empedernido de temas variados, con el tiempo se dedicó a la escritura, sobre todo de cuentos que enviaba a una revista chilena con sede en Temuco, para su publicación, actividad que lo encontró hasta sus últimos años de vida. También supo colaborar con  artículos para los periódicos locales Patria Nuestra, Tribuna y El Fénix. En esta edición, publicamos uno de sus múltiples trabajos.