Gabriel comenzó contando que Blind Tenis "en Argentina hace 13 años que se juega. Creo que Eduardo Raffetto fue quien dio inicio", afirmó. Para agregar que fue "la persona que yo encontré en Tandil. Asi fue mi primer contacto con este deporte".

Afirmando que "hay muchos jugadores. He ido a torneos en Buenos Aires, Malargüe (Mendoza), también en La Pampa, encontrando 27-30 jugadores de la categoría B1, que es ciego total".

"Comencé en marzo de este año. Cuando dejé de ver, una de las cosas que más me frustraban era saber que no iba a jugar más. Cuando me enteré de esto, me metí de cabeza. Al principio no le pegaba nada. Fue bastante frustrante al principio", aseguró. "Después me puse a entrenar más y empecé a agarrar la mano. Estoy mejorando todos los días un poco".

En cuanto a su entrenamiento dijo que es "lunes y miércoles en el Polideportivo con Jona Basualdo, una hora. Los viernes entreno en el CEF con Natalia Falvo, dos horas. Por lo general en la semana me busco a algún amigo que me ayude y me voy a Juarense a la cancha de básquet y entreno ahí dos horas más, a veces hago doble turno. Me acompañan el Mono Tachella o Agustín Gómez".

También se ha sumado a este deporte Bianca Fiser y Gabriel cuenta que "ella nunca hizo otro deporte que no sea atletismo. Ella a la pista sale acompañada y acá tiene que jugar sola. Pero le agarró la mano en poco tiempo. Está muy bien", señaló. Agregando que está "intentando sumarla a los torneos".

Sobre entrenar con tenistas ciegos, Gabriel cuenta: "me sumé a Águilas, una ONG de Bahía Blanca, a cargo de Oscar Sánchez. Voy a viajar a Bahía Blanca para poder entrenar y ellos quizá vengan. Sería un lujo. En ese grupo están el número 2 y 3 del país" expresó.

Le consultamos si entrenar con un profe tiene ventajas para él y dijo "tratamos de hacer lo más parecido a los golpes de los jugadores ciegos, que es más flotado y con las mismas variables. Les pido que me exijan, que no me tiren la pelota a mí para que le pegue. Les pido ese tipo de intensidad, exigencia para subir el nivel".

Con respecto a su primera experiencia, calificó eso como "muy loco. Fue el mundial, directamente. Arranqué en marzo y en septiembre me fui al mundial de Polonia. Nunca había jugado con un jugador ciego y cuando llegué allá ni los argentinos me tenían registrado. ¿De dónde saliste vos?, me preguntaban".

Recuerda haberles contado que entrena en Benito Juárez, a 400 km de Buenos Aires, gracias luego de haber sumado a la iniciativa a la Dirección de Deporte y al CEF. Y cuenta que jugó sus primeros partidos con un alemán y dos italianos, llegando al súper tie break en el tercero. "Estuve muy cerca de ganar", dijo.

Viajando rumbo al mundial "con Natalia en el avión le dije si yo gano un set me vuelvo conforme", recuerda. Agregando con alegría haber jugado "con el N°1 del mundo, un paquistaní, Nike Risby, juega con rodilleras, guantes. Después entendí por qué. Se agacha mucho, pega arrodillado. No gané ningún partido, pero la experiencia que traje la estoy capitalizando ahora".

Gabriel Profesor de Tenis, pero debió adaptarse. Dijo "la adaptación es en todo sentido. En los torneos se busca silencio ultra tumba, para poder jugar y escuchar bien la pelota. Se juega con voluntarios que ayudan. La cancha tiene un perímetro de soga para pisar y darte cuenta dónde estás parado", nos explicó.

"En cuanto a los golpes. No tienen mucho que ver con el tenis convencional. Por ahí los desplazamientos sí, el tema de las piernas, de agacharse bien y eso sí, pero en realidad el tenis es pasar la pelota de un lado a otro es la base del Blind Tenis. Después cada uno tiene su técnica".

Hablando de los profes dijo: "Con David Arascaeta compartimos muchas cosas. En lo deportivo, música, cuestiones personales. Hace poco tuvimos un accidente con David. Fue más susto que otra cosa, por suerte".

"A Jona Argüello lo conocía de antes. Nos llevamos muy bien. Por ahí soy bastante obsesivo. Me gusta que las cosas me salgan bien y ellos siempre están con buena onda, dispuestos a ayudarme. Nos queda un recorrido largo todavía porque recién empezamos", aclara.

"Con Natalia Falvo también. Ella me llevó a Tandil a conocer este deporte. Me pasó a buscar una tarde y me volví con otra energía. Pensé que no iba a jugar tenis nunca más y a partir de eso con ella nos preparamos y fuimos juntos al Mundial. Seguimos entrenando durísimo con toda la gente del CEF. Me ayudan todos Héctor, Sandra, Fernanda", resaltó.

"En el poli también, Luchi (Silva), Juanpa (Conde) aparecen por ahí. Se quedan a mirar, a charlar a dar sus opiniones. Me gusta toda la gente que esté para sumar. Yo estoy para escuchar a todos y para aprender, obviamente".

Cuando le consultamos si elige música o tenis, dijo: "me gustan las dos. El tenis me da la oportunidad de competir. La música no es competencia. Me relajo, aprendo, intento mejorar. Les pongo la misma pasión, pero no puedo decidir por una de las dos", reconoce.

Dentro del ámbito de la música recuerda "arranqué con una batería. Me ha dado muchas satisfacciones. Conocí mucha gente. Después con la viola y hace dos años que tengo clases de canto en Tandil y acá", dijo.

Agregando "me estoy animando a cantar y a tocar un poco la guitarra. La guitarra es más compañera, porque es más chica, pero la batería me gusta mucho. Me gusta darle ritmo a todo. Y más que nada cuando lo compartís con amigos. Ahora volvemos seguramente con estilo folclórico. Espero poder volver para el año que viene con Gabriel (Blasco) y con Mario (Romero). Y bueno, con la guitarra ya seguiré armando mi set de canciones y poder salir a cantar por ahí", asegura.

Le pedimos hablar un poquito del motivo que originó su ceguera para tratar de enviar un mensaje relacionado con salud y prevención, respondiendo: "soy diabético desde los 8 años. Durante la pandemia me agarró una retinopatía diabética proliferativa. Y eso te ataca a la retina. En nueve meses me comió las dos retinas. Les puedo decir a la gente diabética que se informe, que no tenga miedo, pero que se cuide porque es una enfermedad silenciosa y si no te cuidas te va deteriorando por dentro".

Agregando: "Viví bastante renegado. No le prestaba importancia y ahora estoy tratando de amigarme con la diabetes. Lo estoy logrando. Me cuido mucho. Voy a una diabetóloga, a una nutricionista. Me ayudan, pero sobre todo hay que tener voluntad y ganas de estar bien".

"Hay que moverse, tener voluntad, iniciativa y trabajar para uno mismo para estar bien, eso es fundamental. Hay que prestarle atención al tema para prevenir todo este tipo de cosas que después uno, por no creer, por un descuido, vaya uno a saber por qué razón permite que sucedan y después terminan mal".

Sobre si existe alguna posibilidad de recuperar la visión dijo "no lo sé todavía. Escuché que en China hay tratamiento de células madre. En EE.UU. se hizo un trasplante de ojo. Mientras tanto me cuido. Sigo viviendo a full, como lo estoy haciendo ahora y espero seguir haciéndolo con muchas actividades y cosas".

"Si algún día sale algo de eso espero estar listo para hacerlo. Si se da buenísimo y si no se da, seguiré de esta forma".

Sobre sus actividades dijo "siempre estoy haciendo cosas. No me gusta quedarme pensando en cualquier cosa sino pensar para adelante. Busco cosas que hacer siempre. Organizándome más que nada".

"Todos los martes me voy a Tandil. Había dejado el gimnasio, tengo que volver a empezar. Y bueno, por ahí cuando entreno doble turno, hago mañana y tarde. Así que, trato de estar ocupado".

Al final de la charla pidió para destacar la ayuda de "la Dirección de Deportes, que me da una mano grande, al CEF, a los profes, a Natalia, a Jona, a David, a Héctor, a Sandra, a Fernanda del CEF. Al Club Juarense, que siempre desinteresadamente me abren las puertas del club. A los chicos de paleta, cuando les he pedido para ir a pelotear a la mañana al trinquete, siempre están dispuestos", dijo.

Y reconoció a su familia "obviamente, es fundamental. A mis amigos, mandarles un saludo grande. Y bueno, el año que viene esperemos seguir sumando. Voy a salir feliz, a representar a Juárez, como siempre. Y bueno, espero contar con el apoyo que vengo teniendo hasta ahora, el buen apoyo y la energía de toda la gente. Iremos por más. Así que muchas gracias. Les mando un saludo a todos y les agradezco por la onda", terminó.

Gabriel Caparrós es lapridense de nacimiento y juarense por adopción. Hijo de Susana y Juan Domingo, ex jugador de fútbol del club Juventud, de quien ha heredado su pasión por el deporte y de su mamá, la responsabilidad para encarar sus actividades diarias.

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