El hecho

Alrededor de las 16 del miércoles en circunstancias en que un matrimonio compuesto por Carlos Jeger y Adriana Noemí Navarlatz se hallaban trabajando en dos tractores distintos. El hombre sufrió una descompensación y su esposa, que iba más adelante, descendió rápidamente para asistirlo, pero se cayó y murió al golpear la cabeza contra una desmalezadora. Poco después se supo que el hombre sufrió fracturas y fue internado.

El trabajo previsto por el matrimonio para realizar en conjunto aún no había comenzado, estaban trasladándose al potrero donde debían desmalezar. Cuando Adriana Navarlatz vio lo que pasaba intentó auxiliarlo. Al intentar subir al vehículo en el que estaba su marido, la mujer se resbaló y se golpeó la cabeza contra la cortadora, lo que le produjo la muerte a los pocos segundos.

Según se informó Jeger recuperó la conciencia, pero también se cayó y sufrió fracturas en las vértebras lumbares. Aun así, aturdido y conmocionado, pudo llamar por teléfono a una de sus dos hijas, que llegó al lugar y se encontró con el trágico cuadro.

Familia conocida en San Cayetano

El hombre, fue internado en el hospital municipal de San Cayetano, cuya ocupación es del 100 por ciento a raíz de la ocupación de camas de terapia intensiva debido a la pandemia del nuevo coronavirus (Covid-19).

El matrimonio de productores rurales era muy conocido y querido en la zona, por lo que este suceso generó gran conmoción en la localidad de San Cayetano y en la ciudad de Necochea, adonde tenían domicilio y muchas amistades.

El caso, caratulado "averiguación de causales de muerte", es investigado por el fiscal Guillermo Sabatini (UFI N° 3 de Necochea), quien ordenó las pericias, el secuestro de los dos tractores y la operación de autopsia de la víctima. Además, le tomó testimonio a Jeger y a su hija.

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