El caso de Juan Domingo Correa, un hombre que en su vida, entre otras cosas, fue Prefecto y tuvo la bendición de casarse con una juarense y en la parte final de su vida radicarse aquí con su familia.

Para quien diga que no lo vio o no lo conoció, le dejo una pista: La combi pintada con los colores del ARA San Juan, el número 44 (las víctimas) y la Bandera Argentina con la inscripción: Prohibido Olvidar.

Ese fue su homenaje para quienes perdieron la vida en el submarino argentino que quedó en el fondo del Atlántico. Las calles de Benito Juárez, lo vieron pasar y los vecinos por acción o visión nos hicimos protagonistas del homenaje que Juan Domingo hacía a nuestros compatriotas fallecidos.

También, en su vida compartió pasión por los motores y la mecánica con nuestro querido y reconocido Roberto Moscardi. En su taller, ambos pusieron a punto la combi para que salga a la calle funcionando 10 puntos.

Luego de eso y a modo de reconocimiento, amistad y cariño, Juan Domingo visitó cada día "al mecánico" de la Avda. Constitución y se convirtió en su chofer y "custodio" personal. Ambos, hoy deben estar recorriendo los talleres celestiales.

La razón de su partida

Desde hace un tiempo, la vida de Juan Domingo se fue complicando. Una de las dolencias fue cardíaca. A los 77 años debió ser operado del corazón. Esa intervención se realizó en CABA, en el Hospital Militar Central, donde los médicos debieron colocar 4 by pass y su recuperación iba bien, hasta que el 24 del corriente una nueva intervención quirúrgica no pudo ser soportada por su débil corazón.

Así es, entonces que podemos decir que el 24 del corriente, nuestro vecino y amigo Juan Domingo Correa, partió en su viaje eterno, al reencuentro -entre otros- con aquellos 44 argentinos que compartieron su pasión por el mar argentino y su amor por la Patria. También, como ya dijimos, junto al recordado Roberto Moscardi.

En diálogo con su esposa, pudimos saber que su voluntad, siempre expresada fue que al día de partir de este mundo su cuerpo sea cremado. Eso se cumplirá y en pocos días más, una urna con sus cenizas estará siendo entregada a su familia.

A esa misma familia, desde este medio enviamos nuestro cálido afecto y acompañamiento ante tan irreparable pérdida y elevamos oración por el descanso eterno de su alma.

jcantero@elfenixdigital.com