Los vecinos no salen de su asombro. En tanto familiares y allegados de las víctimas están consternados.

El parricidio que consumó Uriel Tapia Sain de 18 años en el barrio Bernardino Rivadavia conmocionó a toda Mar del Plata y quienes conocen la zona señalan como desencadenante la venta de droga que "transforma" a los pibes de la zona, dicen.

Lo cierto es que este miércoles alrededor de las 13hs. Tapia Sain, con antecedentes de violencia familiar, asesinó a puñaladas a su madre y a su abuelo, en el barrio Pinos de Anchorena. También hirió a su abuela.

Tras recibir llamados al 911, personal de las comisarías 2da. y 4ta. llegó al lugar, en Matheu 4.600, en el barrio Pinos de Anchorena de la ciudad balnearia. Alli encontró a Tapia Saín exaltado, cubierto de sangre y con cortes en las manos, indicó el diario La Capital.

El joven forcejeó con la policía e intentó escapar por los techos, pero fue apresado.

El escabroso hallazgo ocurrió unos segundos después, cuando las fuerzas de seguridad se dirigieron al patio trasero de la vivienda. Sobre el piso yacía el cuerpo de la madre del sospechoso, de 36 años, asesinada a puñaladas en el abdomen y tórax.

Además, dentro de la casa encontraron a los abuelos, con lesiones cortantes en el pecho. Ambos fueron trasladados Hospital Interzonal General de Agudos "Dr. Oscar E. Alende", donde el hombre (65 años) arribó en grave estado y murió minutos más tarde. La mujer quedó internada, fuera de peligro.

El joven fue detenido y alojado en la Unidad Penal de Batan y mañana sera indagado por la fiscal Andrea Gómez, titular de la UFI N° 4, en una causa que por estas horas está caratulada como "femicidio, homicidio y tentativa de homicidio".

La funcionaria judicial tomó una serie de medidas tendientes a dilucidar el motivo y la mecánica del ataque, así como posibles pericias sobre el agresor.

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Fuentes: La Capital y 0223